Después de la tormenta

...siempre llega la calma. El sábado tocó día de estar en casa porque no paró de llover en todo el día. Tanto el sábado como el domingo estuvimos limpiando algo de agua de algunas zonas del Hogar Escuela, Politécnico y de la Escuela El Ave María que había entrado a los pasillos debido a la gran cantidad de agua caída.

Patio del Hogar Escuela Armando Rosenberg

Imagen del mar en Santo Domingo

El domingo, en cambio, apenas llovió y cuando lo hizo fue sin intensidad. Así que fuimos a comer fuera, a un sitio muy dominicano. Estuvo muy bien. Comida dominicana, baile... De camino paramos cerca del mar para hacer unas imágenes y ver cómo estaba el mar.

Por la tarde, tocó jugar a béisbol y baloncesto (de lo cual no hay fotos), pero no desentoné del todo a pesar de llevar ya un tiempo sin hacer ejercicio (y mucho menos esos dos deportes. El béisbol era mi primera vez, no conocía ni las reglas). Estuvo muy divertido. Ahí os dejo algunas imágenes.

Cerca del Acuario Nacional